Muchos hemos visto en Suecia un país avanzado y admirable, perteneciente a Escandinavia, una región rica y progresista en cuanto a valores humanos y sociales. Sin embargo, las últimas noticias acerca de Suecia nos la muestran como un país en que reina una extrema violencia, fruto de la lucha entre bandas de narcotraficantes que utilizan a niños-soldado para sus atentados y venganzas dado que estos son inimputables legalmente. Hay ejecuciones de menores, bombas y un desprecio por las vidas de inocentes abatidos en el fuego cruzado. Las informaciones que llegan hablan de una violencia que causa decenas y decenas de muertos cada año, y una cantidad de treinta mil miembros en las bandas que se combaten causando no solo muertos entre ellos sino víctimas que no tienen nada que ver con sus disputas.
Los que mueven los hilos de la violencia viven fuera de Suecia, refugiados en países de que no pueden ser extraditados como Turquía que mantiene con Suecia litigios abiertos porque el país escandinavo no extradita a kurdos acusados de terrorismo en Turquía.
Las principales ciudades tienen barrios en que se amontonan más de quinientos mil inmigrantes que han ido llegando por la política humanitaria de Suecia que se enorgullecía de ser un paraíso multicultural pero el paraíso se ha transformado en pesadilla y el país nórdico se ha convertido en el que se producen más muertes de Europa por arma de fuego y bombas. Y ello confirma que la política de inmigración, emblema generoso de Suecia, ha fracasado y ahora se enfrentan a centenares de miles de inmigrantes que no tienen ningún interés en integrarse en la cultura sueca y muchos de ellos, niños, sí que se integran en la cultura lucrativa de bandas que recluta tres miembros cada día, lo que hace mil y pico cada año, y que se sienten protegidos por las organizaciones criminales y sabiendo que, aunque asesinen, solo pueden pasar tres o cuatro años en alguna institución educativa.
En Suecia el 5% de la población, unas 550000 personas, viven en barrios vulnerables en donde proliferan las bandas de niños-soldado.
Hace año y medio, la entonces primera ministra sueca, la socialdemócrata Magdalena Andersson, declaró que el país había fracasado a la hora de integrar a las grandes cantidades de inmigrantes acogidos en las dos últimas décadas, lo que ha producido que se hayan creado sociedades paralelas junto a la irrupción de las bandas. El actual jefe de gobierno, el moderado Kristerson, dijo en una intervención en el Parlamento que lo que está pasando es una crisis nacional autoinfligida y sobre ello el consenso es casi general y se lamenta el buenismo y la falta de un debate abierto sobre la composición étnica o sobre las consecuencias de que Suecia recibiera a tantos inmigrantes que se han agrupado en suburbios, cada vez más degradados y en situaciones de precariedad social. Durante muchos años, los distintos gobiernos suecos se dedicaron a destacar el presunto impacto positivo del multiculturalismo. Y ahora se habla incluso de que el ejército va a intervenir para intentar controlar la situación, aunque será difícil por la laxitud de las leyes suecas para enfrentarse a delitos graves por parte de menores.
Hay una serie en Filmin, titulada La delgada línea azul sobre la policía sueca en que se muestran sus conflictos personales en relación con su trabajo, y el espectador asiste incrédulo a la tensión y violencia de la sociedad sueca, así como a la explotación de inmigrantes que mueren hacinados y prisioneros en cárceles que les han preparado sus compatriotas. El paraíso sueco produce espanto.
Hechos con una pegada irrefutable y que revelan que cualquier artificio, únicamente posponen una solución. En Suecia, recuerdo a su titular del ministerio de economía, que rebatir esa imagen de paraíso socialdemócrata porque incluso los propios socialdemócratas, apostaban por claramente por las reglas de mercado desde hace décadas. Algo parecido ha ocurrido en Ecuador donde las rebajas penales de Correa y algunas circunstancias más,han convertido a ese país en una nueva plataforma del narco y se ha envuelto de una violencia inusitada, Joselu. Me encanta tu valentía, Joselu, porque expones los hechos como son.Aunque la realidad sea molesta.
ResponderEliminarHe buscado información en distintos medios desde Diario.es, El Mundo, ABC, El País y las noticias concuerdan. No puedo enlazar las noticias porque son de pago, pero me he informado bien y esto es una síntesis de la situación alarmante en Suecia. De hecho, los países escandinavos han modificado su normativa de inmigración ante lo que está sucediendo en Suecia. Dinamarca, en mucho menor grado, ha endurecido su política migratoria, aunque su problema es menor que en Suecia. No sé si es molesta la noticia pero es necesario saberlo.
EliminarEs una realidad molesta e incómoda, Joselu, porque a todos nos encantaría contar otra realidad, no tan conflictiva.. Pero ignorar sus consecuencias no conduce más que agravar el problema. Incluso algunas políticas de subsidios, que se consideraban primordiales para fomentar la integración, han provocado un aislamiento mayor y más efectos contrarios. Cómo escasa motivación para salir de tu círculo. Y me resulta curioso, que las segundas y terceras generaciones de inmigración, como ha ocurrido en Francia, busquen su identidad en la tierra de sus ancestros y de forma vehementes. Muchas veces se hace el énfasis en las sociedades de acogida y no tanto en el propio inmigrante, que hace toda su vida en barrios que son auténticos guetos, pero como elección individual. Es un problema complejo, que ha aflorado incluso al cabo de generaciones. Michel Houellebecq, que algunos consideran polémico, no rehúye este debate. La inmigración como posible elemento transformador y que nos pueda derivar hacia sociedades radicalmente diferentes a los valores actuales de Occidente..Porque los valores futuros de Occidente, estoy seguro, serán otros. Esos flujos poderosos se producen a una velocidad más lenta de lo que nos permite a nuestro juicio captar, pero creo que tienen peso y estamos viendo el comienzo de ese desplazamiento. El que no lo quiera ver, es un iluso.
EliminarMi hija mayor trabaja en París en un hospital como embrióloga desde hace casi un año. En este tiempo ha encontrado una red de relaciones extensa y muy positiva: todos españoles bien situados en puestos de trabajo que no han encontrado en España. Hay miles de españoles en París, por poner solo un ejemplo. Mi hija se siente a gusto con ellos, pero se encierra en una especie de gueto cultural que es paralelo a la cerrazón de la sociedad francesa a admitir en sus relaciones sociales a otros que no sean como ellos. Es un doble factor. Los españoles se encuentran más cómodos entre ellos y, por otra parte, los franceses también. Teniendo en cuenta que dichos españoles desempeñan trabajos muy especializados y considerados.
EliminarVayámonos a los argelinos, marroquíes de tercera generación, que viven en su banlieu y gueto particular y que se sienten infinitamente menos integrados en la cultura francesa, a la que terminan rechazando y odiando por su elitismo y por su sectarismo -normal, por otra parte-.
El multiculturalismo es un fracaso y la integración es una utopía, salvo en casos muy reducidos. El resultado es una Europa dividida, enfrentada y cuya solución es no difícil sino imposible. Ser conscientes de ello es conflictivo y nos puede llevar a sentirnos racistas, pero es la realidad. Hay sociedades homogéneas en el mundo, que defienden su identidad y no permiten las migraciones, y sociedades que por la deriva histórica las hemos aceptado y utilizado como aportaciones a nuestra forma de economía y de vida, pero lo real es que no funciona. Decirlo es peligroso. Pero cerrar los ojos...
Tema delicado de abordar y ante el cual, si lo haces diciendo la cruda realidad, te pueden caer palos por todas las bandas. No es nada fácil, asimilar una población tan diferente y con pocas ganas o nula capacidad de integración.
ResponderEliminarGracias por la información.
Saludos.
Sí, ciertamente no es fácil integrar a una cantidad de población muy elevada ajena a las raíces culturales del país. De hecho, de esto saben mucho en Francia y saben que tienen un problema. Otra cosa es que no se pueda hablar de ello por no sé bien qué motivos. Saludos.
EliminarEl tema que planteas es muy complejo ¿hasta dónde se puede llevar la solidaridad? si se lleva muy lejos el país tiene que estar preparado para lo que va a venir, y puede ser cualquier cosa. Lamento mucho que se encuentren en esa situación, no tenía ni idea, ojalá puedan hilar fino porque parece un asunto muy delicado.
ResponderEliminarTe agradezco que des visibilidad a esta situación, hay muchos sucesos de los que ni nos enteramos, por el motivo que sea.
Un abrazo!!
La prensa se ha hecho eco de la realidad en Suecia, pero son tantas las noticias que hay cada día que sin duda, ha pasado desapercibida la realidad sueca. Cada país es un mundo y no sabemos unos de otros. Lo que está pasando es una advertencia clara sobre lo que puede terminar pasando a otros países con políticas migratorias abiertas y sin control. Otros países escandinavos, como Dinamarca, han endurecido sus políticas de inmigración, pero parece que no se puede hablar de ello abiertamente. Ignoro los motivos.
EliminarUn abrazo, Ana.
Mi estimado Joselu.
ResponderEliminarAcabo de aparecer y me he puesto a contestar, primero a las personas del bloc, y ahora, a ti en primer lugar.
He de decirte que recuerdo una persona muy cercana que fue con diez y ocho años al concierto de los Rolligs Stones en Estocolmo. Corría el año 1967. Esta persona cercana fue con un uruguayo. Este uruguayo era de tez morena, un "cabecita negra" que se llama por allí.
Decirte que ellos iban con el pensamiento de que en Suecia todo era diferente, que eran además de más liberales, nada reaccionarios (connotación de aquella época), y nada xenófobos.
Decirte que salieron pies de aquel concierto de vuelta a Barcelona, que de negro HdP no bajo la cosa y que no era bien recibido, allí, por ser de piel cobriza.
En aquella época yo tenía 14 años y quien fue con esta persona era mi hermanastro que me llevaba diez años, y fue porque él era músico y su compañero era del conjunto.
Vinieron desilusionados.
No sé en conjunto si el problema es de la emigración, no lo sé, pero sí sé que hace mucho tiempo que hablaban de cerrar el cupo de entrada.
Igual tanto buenismo no es bueno, no lo sé, ya te digo, pero es que a mi edad no me sorprende nada, y lo he visto en Teresas, que es cierto que la ayuda es buena, pero después se convierte en costumbre y más tarde es una rutina para cambiarse a obligación.
Y no creo que sea lo mejor, pero no lo sé . Es sólo una opinión.
Un abrazo
Abordas varias cuestiones, todas interesantes. Por un lado, el racismo de la sociedad sueca frente a los diferentes del que das un testimonio muy antiguo. Pienso que todas las sociedades son más o menos racistas. ¿Cuántos amigos musulmanes tenemos? ¿Cuántos amigos negros invitamos a cenar a nuestra casa? ¿Cuántos latinos admitimos en nuestra vida cotidiana? Las sociedades en buena parte perviven en la identidad porque están cerradas. Sin embargo, Suecia ha mantenido durante las últimas décadas una posición de brazos abiertos a la inmigración, aunque, claramente, no se ha integrado en la sociedad sueca y se han creado guetos en barrios marginales de los que se ha apoderado el narcotráfico y las bandas. Ello se les ha escapado de las manos y ahora tienen un buen problema por asesinatos y niños-soldado de los que se aprovechan porque son inimputables.
EliminarOtra cuestión es la que señalas en obras tan benefactoras como Teresa de Calcuta, cuyas aportaciones sociales, en forma de comida, no es ya solo una ayuda, sino una costumbre y luego una obligación.
Entendemos que ser bueno es positivo, pero el buenismo no trae buenas consecuencias. Lo estamos viendo y lo iremos viendo con el tiempo. No tenemos problemas tan graves como Francia o Suecia o Alemania, pero tiempo al tiempo. Sé que es un tema que nadie se atreve a abordar directamente por un sentimiento de peligro ante la posibilidad de afrontar cuestiones incómodas.
El caso sueco es paradigmático. Y Teresa de Calcuta también.
Un abrazo, Miquel.
Buenos días Joselu:
ResponderEliminarPues yo te diría, que hace tiempo que me son bastante atipaticos estos nórdicos.Ahora quieren tener la moneda euro, están un poco entre los ingleses y los holandeses que todo les irrita ellos son de gama alta y los demás los siervos...
Si que han sabido tener un statu quo y sobre todo conciliación familiar que es lo único que me copiaria de ellos. Tu que has sido profesor sabes que siempre se nos han comparado con ellos sobre todo con Finlandia etc.Pero cuando llegan las noticias a nuestro territorio: por llamarlo de alguna manera no vayan a molestarse .Llegan las noticias manipuladas: me acuerdo que en Finlandia y Suecia e incluso podemos añadir Noruega que después de mucho absentismo escolar por problemas de alcoholismo en los más jóvenes se implató esta nueva reforma en Educación:profesor, ayudante, grupos pequeños, apoyo, y conciliación familliar...y solo para nacidos ahí o escogidos por statu familiar.
Cuando se hizo el puerto de Arguinegin en Gran Canaria que lo financió un Noruego porqué compló una parcela para hacer una urbanización turística.Contrató en peso ; trabajadores,con sus cocineros y sus profesores y vivian en casas prefabricadas y cotaron la entrada a todo personal que no fuesen ellos.Nunca hablaron español ni contrataron a personal español: en los dos o tres años que estuvieron .Dicen que Noruega es el país más feliz del mundo...amén digo yo...
Pero si que de los errores se tiene que aprender, a ver que soluciones encuentran ...y sirvan de ejemplo...
Un abrazo hoy es fiesta en la localidad que resido San Gregorio,felicidades para quien se llame así.
Feliz San Gregorio. En el CIR nº 10 hice la mili, en el campo de San Gregorio donde hacía un frío -Zaragoza- helador. Pero tengo buenos recuerdos de la mili. En cuanto a los países nórdicos, no sé qué pensar. Siempre han sido modelos avanzados respecto al sur de Europa, pero ahora Suecia lo está pasando muy mal en cuestiones que puede que en pocos años nos pasen a nosotros. Hay que tomar nota por lo que pueda pasar. Y más vale prevenir. La filosofía de vida de Escandinavia es muy diferente a la de los países mediterráneos, y pasan por ser modelos muy eficientes y libres de corrupción, quizás por su modelo protestante. Un abrazo.
EliminarLlevo tiempo siguiendo con gran pesar este tema del que hablas y me ha parecido muy interesante lo que has contado y los comentarios... Creo que yo estoy, o estaba, en el lado de los buenistas... pero cada vez me cuesta más.
ResponderEliminarTodas las sociedad nos cerramos sobre nosotras mismas. Más aún en tiempos de crisis y de incertidumbre, pan primero para los míos, ya sabes.
Me da mucha pena
Me alegro de que conocieras el tema que pasa desapercibido para la inmensa mayoría de los lectores de prensa como un detalle, pero la situación ha alarmado a otros países escandinavos como Dinamarca que ha girado radicalmente en su política migratoria. En todo caso, observo que es un tema sobre el que cuesta opinar y manifestar un punto de vista. Los comentaristas han pasado como sobre brasas calientes a la hora de comentar y otros ni siquiera lo han hecho. Oriana Fallacci habló hace décadas de Eurabia, en lo que se iba a convertir Europa si seguía la marea migratoria. Queremos ser buenos, no queremos ser racistas ni xenófobos, no nos gusta vernos retratados como excluyentes, pero el tiempo pasa y los acontecimientos y las mareas humanas continúan masivamente. Es muy difícil saber qué hacer porque queremos ser buenos, humanitarios y tolerantes, y da mucha pena ver dramas humanos que hay detrás, pero hay muchas otras cosas que vienen también.
EliminarQueremos ser buenos y hay como un sentimiento de culpabilidad. Claro, muchos de esos países andan jodidos por lo que Europa hizo en su momento o sigue haciendo, pero tampoco sé hasta que punto Europa debe ser la policía del mundo.
EliminarAlgo no funciona cuando jóvenes de segunda generación no se quieren integrar en el país que les ha acogido y, además, ven con orgullo su país de origen, pero no se puede hablar de ello, es un tema tabú. No se pueden hacer estadísticas con la nacionalidad (creo que Dinamarca ya lo ha hecho) y no se puede hablar de las políticas llevadas a cabo no han servido para nada.
Es un tren que nos acabará atropellando porque no hacemos más que mirarlo con los ojos abiertos como platos.
Creo que es certera tu conclusión. Es algo de lo que no se puede hablar, pero que nos terminará arrollando con nuestros ojos abiertos como platos.
EliminarHay un ejemplo que ha pasado desapercibido últimamente de la estupidez que nos gastamos aquí, en España. Llegan unos ciudadanos chinos perfectamente identificados a Barajas pidiendo asilo porque son cristianos y son perseguidos allí. Pues muy bien, a estas personas les ha sido denegado el necesario (este si, por el peligro real que tienen) asilo, mientras vemos que a nuestras costas llegan miles y miles de personas que no sabemos quienes son, no sabemos si son delincuentes, a que se dedican, ni que antecedentes tienen, a estos los recogemos y a los otros les mandamos de vuelta a China para que les encarcelen. Este es el nivel de gilipollez e indecencia del "humanitarismo de escaparate" que gastamos.
ResponderEliminarhttps://www.outono.net/elentir/2023/11/04/sanchez-deporta-a-cristianos-perseguidos-a-la-china-comunista-mientras-reparte-a-inmigrantes-ilegales-por-toda-espana/(He puesto el primero que he pillado pero hay muchos)
Porque no tengas dudas todo esto es por el escaparate, al final a los que legislan sobre esto no les toca nada y les da igual lo que pase en los barrios obreros, ellos no lo sufren, sus hijos no van con esta gente al colegio.
No, yo no creo en el "multiculturalismo", sinceramente creo que la Cultura Occidental la herencia de Grecia y Roma es claramente superior al Islam y la Sharia y a los resultados para las personas que viven en paises de respectivos regimenes me remito.
No tengo complejo de víctima, no tengo que pedir perdón a nadie porque antes sus países fueron colonias de Europa.
Muchas manifestaciones enseñando tetas en Iglesias con curas de ochenta años porque son machistas y mucho silencio en las mezquitas, porque todo el mundo sabe que el Islam es progresista y feminista... y asi con todo.. Poco nos pasa.
Y claro si dices esto, eres xenofobo, de ultraderecha y nazi... en fin...
Un saludo y como siempre, disculpa la extensión.
Existen otros puntos de vista sobre la situación en Suecia que no coinciden con tu texto. Por ejemplo, algunos medios y expertos han destacado los aspectos positivos de la política de inmigración de Suecia, como su contribución al crecimiento económico, la diversidad cultural, la solidaridad y la innovación. También han señalado que la violencia de las bandas no es un fenómeno nuevo ni exclusivo de Suecia, sino que tiene raíces históricas, sociales y estructurales que requieren una respuesta integral y coordinada de las autoridades, la sociedad civil y la comunidad internacional. Asimismo, han defendido que Suecia sigue siendo un país seguro, pacífico y democrático, que respeta los derechos humanos y el estado de derecho, y que tiene un alto nivel de bienestar y calidad de vida para sus habitantes. Estos son algunos ejemplos de otros puntos de vista sobre la situación en Suecia, que muestran una visión más matizada y equilibrada, descartando el buenismo y el tremendismo.
ResponderEliminarTambién es necesario indicar que el gobierno sueco ha tomado algunas medidas como introducir cambios legislativos para endurecer las penas por delitos graves, facilitar las expulsiones de delincuentes extranjeros y aumentar los recursos para la policía y la fiscalía, así como invertir en políticas sociales y educativas para mejorar la integración de los inmigrantes, prevenir la exclusión y fomentar el empleo y la formación.
Te dejo una publicación que creo que podrás leer porque eres suscriptor de Diario.es sobre lo que está pasando en Suecia ESPIRAL DE VIOLENCIA EN SUECIA
EliminarDe todas maneras, está claro que cualquier hecho por notorio que sea es posible que sea visto de formas diferentes. Hay quien dice que la educación pública ha ganado en igualdad y equidad comparativamente con la que se impartía en los años noventa u ochenta. Los que hemos sido profesores, somos conscientes del desplome total en cuanto a contenidos, a la falta de aptitudes en cuanto a memorización, ortografía, capacidad expresiva, conocimientos en general... Es algo evidente, pero podemos decir que la educación ha mejorado en equidad o en contenidos progresistas. Todo permite, no dos, sino infinitas lecturas y hay quien puede decir en plena noche que siente que es mediodía, porque así se lo dice un pálpito íntimo.
EliminarLo que pasa en Suecia es gravísimo y de ello son conscientes los suecos, aunque probablemente se puede aplicar que una crisis implica una oportunidad como expresa un aforismo oriental.
Claro que Suecia es un estado democrático, aunque relativamente seguro, cada vez menos, y es un país que defiende los derechos humanos -nadie lo ha negado- y la vida de los suecos hasta no hace mucho ofrecía con su monarquía un alto nivel de vida, pero negar que algo está pasando y muy grave es desconocer informaciónes básicas que está publicando la prensa, aunque pase desapercibido. Las señales de alarma se han encendido para todos.
Tu último párrafo es certero: endurecimiento de penas, expulsiones, aumento de recursos de policía y fiscalía, así como invertir en políticas sociales y educativas adecuadas para la integración y prevención de la exclusión. Totalmente de acuerdo.